martes, 26 de abril de 2011

Grietas 64

Norma Bazúa
(1928 - 2011)




Un pasquín del Grupo La Resistencia 2012
Número 64 / 26 Abr 2011
En la edición: Denisse Sánchez Erosa .
Argentina Casanova, Ileana Garma .
Mario Pineda . Adán Echeverría,
Joelia Dávila, Jesús Bartolo


Dirección: Jorge Manzanilla
palabrasgrietas@yahoo.com.mx






Eduardo Kintero



PALABRAS EN HOMENAJE A LA MAESTRA NORMA BAZÚA
(IN MEMORIAM)

SANTOS VELÁZQUEZ


Experimentar el amor es vivir su
quemadura, desafiar lo que no está
en el código de nuestras emociones,
echar andar por lo más desconocido
de uno mismo.
La poesía, en especial la que surge de ese mar, está destinada a permanecer en el tiempo.
Norma Bazúa lo supo y, como la gran poeta que es, nos conduce por íntimas veredas, nos transmite con imágenes poderosas lo que no habrá de borrarse, ni siquiera en el último momento, el de la muerte.

Norma Bazúa Fitch. (Los Mochis, Sinaloa, 1928; Ciudad de México, 2011). Poeta militante, de escritura punzo cortante. Autora de Cómo dibujando las distancias (merecedor del premio JOMAR), De ser, amor y muerte (con una presentación de Carlos Pellicer), A manera de pretexto el mar, Boceto para un palabrario, Varo entre remedios caseros, Flor simultánea al fruto y Aprender la muerte, entre otros. En 1976 le otorgaron la Flor Natural de Guasave, y en 1986 fue finalista del Concurso Internacional Carmen Conde, España. Ha participado en múltiples encuentros y antologías, entre ellas 40 Barcos de Guerra (2009) y La semilla desnuda (Poesía Viva. 90 poetas, 90 poemas). Actualmente se le realiza un Homenaje Nacional por sus 82 años. Próximos a salir sus poemarios Una chispa del cuerpo y ya el incendio del sueño y Ataúd de arena.



DIÁLOGOS CON LA MALDAD DE UN HOMBRE BUENO

ADRIANA TAFOYA


En cuestión de logros literarios, el que esté libre de
pecado que renuncie a la oportunidad que le dan de
ganarse un premio (…) o viajar gratis y con todo pagado
a algún encuentro a emborracharse...
A. Echeverría

El que no tranza no avanza
Dicho popular

Quién no quiere ser guapo y emborracharse
Quién no desea tener muchas mujeres y emborracharse
A quién no se le antoja conseguir mucho dinero, viajar y emborracharse
A quién no le gustaría ser el primero en todo, tener mujeres muchas y emborracharse
Quién se resistiría a una maleta llena de billetes, quedarse con el derecho ajeno
y emborracharse
Quién no se emociona con la idea de ser el primero en todo, ser guapo,
acostarse con niñas y mujeres, viajar, tener mucho dinero y emborracharse
Quién se aguantaría las ganas de tomar el dinero ajeno, meterse a la casa grande, tener
a la mujer del amigo, acostarse con hombres, niñas y mujeres, viajar bien vestido
y emborracharse
Quién no disfruta de sacar provecho, ser oportunista, buen ratero o abusador,
es natural disfrutarlo y emborracharse
Quién no es inteligente para saber que todo esto es humano y verdadero
Pero dime,
a quién no le extasiaría vengarse, cortarle los güevos a este alegre Casanova
recuperar su dinero, acuchillar a los amigos del ojete,
viajar a Europa con el rostro muy en alto
con la ropa llena de sangre
y después, ¿por qué no?, también emborracharse.





VANILOQUIO

ADRIANA TAFOYA


Para que ella pueda pensar
Tuve que abrirle la cabeza
Un poco de oxígeno clarividente
Por lo menos un poco de coherencia
De inteligencia no infectada
al menos
Tres centímetros de herida grasa
de ese cuero negro y cabelludo
donde trueno diez veces
el cristal del vaso
y destrozo el vaniloquio
de ese cabello fatal

Para eso son las heridas
para que la arrogancia sangre
y un vibrante cerebro, limpio
de sangre vieja, de golpe se pueda
en un golpe abrillantar.



DONDE SE AHOGABAN LOS VOCABLOS ANTES DE SALIR AL PAPEL

NORMA BAZÚA


No perseguí horizontes
mariposas solares sobre ríos abiertos a lagunas
ni sobre el mar un viaje de olas decididas

pero hubo esfuerzo de bienquerer entre mis manos

Las dejaba caer sobre la mesa cansadas del intento
tendida para sordos persistentes comensales
glotones de servilletas en ojal
convidados al festejo de una diaria tarea

titanes derrotados por mis nervios caseros
enraizados al llanto en cautiverio de cristal
donde se ahogaban los vocablos
embriagados antes de salir al papel
Y cumplir su oficio de bufones.




NI LETRAS DE CAMBIO PARA ESCRIBIR MI EPITAFIO

NORMA BAZÚA

Ahora sí me ganaste palabra
ni tiempo tuve para tomar una lanza
y ensartarte

Estoy aquí moribunda alirrota
desplumada pájara de cuenta corriente
sin fondos abecedarios para pagar mi funeral

Ni letras de cambio
para escribir mi epitafio


SONETO 129

NORMA BAZÚA

A Enrique González Rojo


Somatizo lingüista y de pegote
Busco en la sopa hasta el menor pelillo
Si no encuentro el vocablo, pongo mote.
Sé de mano, muñeca hasta el dedillo.

No me arredra la voz ningún peligro
-no eludo dialogar con la pelusa,
ni pienso que de voz yo me denigro-
Ni si abordo Academias, por ilusa.

Me enfrento a discutir con un pelmazo
que presume de sabio en perifollo.
Y hasta recibo un neologismo acusa.

Yo de filigranero empuño el mazo
y de barrocos enracimo el poyo.
Pero de sencillez es mi repulsa.


DEJO AL TIEMPO CUMPLIR

NORMA BAZÚA

A los indiferentes



Desde aquí los miro, me molesta esta altura necesaria.
Soy una hormiga tributaria que ama a la tierra
un escarabajo constructor
una larva que a voluntad custodia su crisálida

De pronto me brotan alas colores y sonidos
Soy rica de lenguajes
me envanezco frente a los mudos de espíritu y grito
frente a los rengos corro.

Soy cruel como una flor sobre una lápida

Con esto quisiera convertirlos
Siquiera en un momento de ira.



Esta es una publicación de la Catarsis Literaria El Drenaje. Si algo aparece publicado acá, seguro es que coincidimos en ideas




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